Adopción de Danielle
¡Adoptado! el
23-3-2018
- Nombre Danielle
- Clase Gato
- Desde 16-12-2017
- Sexo Hembra
- Edad 7 años y 2 meses
- fecha de nacimiento 9/2017
- Raza Siamés
- Tamaño Mediano
- Localidad Alicante (Alicante)
- ID 77
Descripción
La vida de Danielle empezó en la calle, como la de tantos gatos en España, tendría una mamá amorosa y unos hermanos con los que jugar pero buscando cobijo y calor se metió en el motor de un coche que cuando arrancó le llevó a la separación de su familia con apenas tres meses de vida. El coche aparcó en un parking privado, ella salió huyendo muy asustada y herida, el motor del coche le había cortado la mitad de la oreja derecha y le había producido unos importantes quemados en su diminuta pata trasera. En este parking estuvo un tiempo indeterminado, al final alguien la vio y empezaron a ponerle algo de comer, ella sólo salía cuando nadie la miraba, estaba aterrorizada por su traumático viaje. Allí sus heridas fueron sanando solas mientras que ella se iba acostumbrando a la oscuridad y la soledad. Intentó buscar la salida pero en vez de encontrarla se bajó a un segundo sótano del parking con lo que sus posibilidades de encontrar la libertad se alejaron.
Un buen día se dejó ver con más claridad y los vecinos avisaron a un miembro de la asociación que pudo cogerla poniendo una jaula trampa con comida.
Resultó ser una preciosa gata siamesa con unos impresionantes ojos azules que quitan el hipo.
Desde el principio, a pesar de estar muy asustada, dio muestras de que no iba a ser complicado socializarla. Cuando la acariciábamos se mostraba temerosa pero al mismo tiempo ronroneaba dando muestras de lo mucho que le gustaba que lo hiciéramos.
En unas pocas semanas estaba ya totalmente integrada. Es muy comilona: patés, pienso, chuches...todo es de su agrado.
Es una gatita simpática, divertida y juguetona. Le encanta jugar con sus compañeros de acogida y que la cojan al brazo para recibir mimos y caricias.
Su belleza impresiona pero su carácter es todavía "más bonito".
Un buen día se dejó ver con más claridad y los vecinos avisaron a un miembro de la asociación que pudo cogerla poniendo una jaula trampa con comida.
Resultó ser una preciosa gata siamesa con unos impresionantes ojos azules que quitan el hipo.
Desde el principio, a pesar de estar muy asustada, dio muestras de que no iba a ser complicado socializarla. Cuando la acariciábamos se mostraba temerosa pero al mismo tiempo ronroneaba dando muestras de lo mucho que le gustaba que lo hiciéramos.
En unas pocas semanas estaba ya totalmente integrada. Es muy comilona: patés, pienso, chuches...todo es de su agrado.
Es una gatita simpática, divertida y juguetona. Le encanta jugar con sus compañeros de acogida y que la cojan al brazo para recibir mimos y caricias.
Su belleza impresiona pero su carácter es todavía "más bonito".